Y llegamos a la docena de capítulos... casi tres meses desde que comenzamos nuestro viaje en busca de palabras fascinantes e ignotas a las que domeñar con nuestras artes creativas...
Esta semana es de nuevo protagonista un ser alado: el vencejo -apus apus- de alas largas y puntiagudas y cola ahorquillada... Veamos qué voces lo acompañan:
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Gabriel (El del Ferry)
En la ciudad vieja se mezclan antiguos monumentos con los habitantes actuales.
Al sur veo la entrada del CENOBIO, sus escaleras acumulan cantidad de guano de VENCEJO, por ésta sale un religioso con un llamativo anillo de CARBUNCULO. Sobre la izquierda un mendigo con notoria PERLESIA pide limosna cerca de la entrada lateral.
Al oeste, sobre la plaza hay multitud de puestos ambulantes. Es hora de comer y llama mi atención un cartel reza "choripan pancho TARANGANA bebidas frias"; hacia allí camino, pido un sochori mariposa y acabo mi relato.
Eva Moreti
Hábitos personales: evitar TARÁNGANAS, palabras soeces, joyas costosas, especialmente el CARBUNCULO, que es sagrado, armas de fuego y el sexo indebido (entiéndase fuera del matrimonio, que considero vínculo ideal), promover el reciclaje y ayudar a los huérfanos y viudas.
El CENOBIO donde vivo está construido de piedra y madera, alguien con sentido del humor pintó las paredes amarillas y molduras azules.
Por las tardes hago Pilates para evitar la PERLESÍA, tan común en las sociedades modernas. Mientras escribo, en el jardín trinan VENCEJOS y alondras.
Se piensa que la vida austera es aburrida, pero particularmente creo que la realidad es mucho más que bailes y jarana.
Pioneer123
Era algo increíble. Ricos, pobres, guapos, feos, listos, tontos comiendo todos en la misma mesa del CENOBIO, comiendo la misma bazofia, pero comida era! Asco de TARÁNGANA! .
¡Parece hecho de los VENCEJOS de la plaza! Calma el estómago, pero no da fuerza y quedas PERLÉSICO. Pero encima hay que dar gracias al señor Tomas, que ha sido muy amable de invitar a una copiosa comida a todo el pueblo, ya que a su señora le fue devuelto su colgante de CARBÚNCULOS.
Altafulla
Él ya había observado como los viejos palomos se quedaban durante días quietos en algún alfeizar antes de caer al suelo y convertirse en TARÁNGANA de gatos o urracas. Cuando la prematura PERLESÍA le impidió volar alrededor del campanario del CENOBIO, se acurrucó en el trifolio de una ménsula. Después de dos largos días sin comer el VENCEJO supo que no aguantaría mucho más. Un halcón de ojos color CARBÚNCULO resolvió sus temores cuando se lo llevó entre las garras.
Viec
Consuma toda clase de TARÁNGANAS, dijo el doctor con confianza, dese un gusto, pues, hombre, total su PERLESÍA es irreversible, coma de todo, carnes, pollo, pavo, VENCEJO, frutas y verduras.
Evite la paz de los CENOBIOS, vaya al centro de la Capital, concurra a centros recreativos, busque compañía en los parques, inscríbase en una salsoteca, coloque en su pieza una fuente con piedras energizantes, malaquita, CARBUNCULO, turquesa, coral. Y encomiéndese a todos los santos, porsiaca.
Ojo humano
Esta es la leyenda del VENCEJO enamorado del cielo.
Nació en la cúpula de un CENOBIO, asunto relevante porque ahí aprendió a soñar escuchando historias de un paraíso con calles de oro, mar de cristal y toda piedra preciosa, topacio, cornalina, CARBÚNCULO y un río de agua viva.
Los monjes le aconsejaron que si quería volar a grandes alturas jamás, jamás comiera sangre porque la PERLESÍA es una enfermedad que sufren los hombres (eventualmente las aves) por ingerir TARÁNGANAS sin moderación.
Los vencejos tienen memoria pequeña, nuestro amigo descendió al jardín y entretenido en restos de comida que alguien descuidó -morcilla, carne, pan-, el ritual sibarita de mi gata lo atrapó para siempre.
Crysolidan
Confinado en un remoto CENOBIO, dormita –sin demasiado agobio- un viejo eremita, de gran genio, pequeño tamaño y barba gris como el niobio…
…Antaño conocido por su sapiencia y maestría, a menudo yace en el lecho de su alcoba, consumido por una acuciante PERLESÍA…
…De cuando en cuando mordisquea una TARÁNGANA, de aspecto dudoso… mas no se la quites, ¡ni por lo más hermoso!, o de lo contrario montará un auténtico alboroto…
…A veces también engulle medio muslo de conejo, pero cuando le sirven VENCEJO, enseguida frunce el entrecejo…
…Y es que cuando se encienden esos ojos de rubí, rojos de rabia como el CARBÚNCULO, su mirada es dolorosa, mordaz e incómoda, cual molesto forúnculo.
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Confinado en un remoto CENOBIO, dormita –sin demasiado agobio- un viejo eremita, de gran genio, pequeño tamaño y barba gris como el niobio…
ReplyDelete…Antaño conocido por su sapiencia y maestría, a menudo yace en el lecho de su alcoba, consumido por una acuciante PERLESÍA…
…De cuando en cuando mordisquea una TARÁNGANA, de aspecto dudoso… mas no se la quites, ¡ni por lo más hermoso!, o de lo contrario montará un auténtico alboroto…
…A veces también engulle medio muslo de conejo, pero cuando le sirven VENCEJO, enseguida frunce el entrecejo…
…Y es que cuando se encienden esos ojos de rubí, rojos de rabia como el CARBÚNCULO, su mirada es dolorosa, mordaz e incómoda, cual molesto forúnculo.
Me encanta
DeleteMuy bella descripcion
Delete
ReplyDeleteEsta es la leyenda del VENCEJO enamorado del cielo.
Nació en la cúpula de un CENOBIO, asunto relevante porque ahí aprendió a soñar escuchando historias de un paraíso con calles de oro, mar de cristal y toda piedra preciosa, topacio, cornalina, CARBÚNCULO y un río de agua viva.
Los monjes le aconsejaron que si quería volar a grandes alturas jamás, jamás comiera sangre porque la PERLESÍA es una enfermedad que sufren los hombres (eventualmente las aves) por ingerir TARÁNGANAS sin moderación.
Los vencejos tienen memoria pequeña, nuestro amigo descendió al jardín y entretenido en restos de comida que alguien descuidó -morcilla, carne, pan-, el ritual sibarita de mi gata lo atrapó para siempre.
Por cierto, canto de vencejos aquí:
http://www.youtube.com/watch?v=SWNu6kmrNcA&feature=related
Hermoso, elegante y original... ¡muy bueno!, gracias Ojo humano :)
DeleteQué linda historia.
Deletemuy lindo! historia chiquitita y linda como un vencejo ;)
Delete
ReplyDeleteConsuma toda clase de TARÁNGANAS, dijo el doctor con confianza, dese un gusto, pues, hombre, total su PERLESÍA es irreversible, coma de todo, carnes, pollo, pavo, VENCEJO, frutas y verduras.
Evite la paz de los CENOBIOS, vaya al centro de la Capital, concurra a centros recreativos, busque compañía en los parques, inscríbase en una salsoteca, coloque en su pieza una fuente con piedras energizantes, malaquita, CARBUNCULO, turquesa, coral. Y encomiéndese a todos los santos, porsiaca.
viec@hotmail.es
Jajaja, ingenioso contexto para encuadrar las voces de nuestro reto semanal... ¡Gracias, Viec! ;-)
DeleteOs dejo un nuevo aporte de nuestro custodio Altafulla:
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Él ya había observado como los viejos palomos se quedaban durante días quietos en algún alfeizar antes de caer al suelo y convertirse en TARÁNGANA de gatos o urracas. Cuando la prematura PERLESÍA le impidió volar alrededor del campanario del CENOBIO, se acurrucó en el trifolio de una ménsula. Después de dos largos días sin comer el VENCEJO supo que no aguantaría mucho más. Un halcón de ojos color CARBÚNCULO resolvió sus temores cuando se lo llevó entre las garras.
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Era algo increíble. Ricos, pobres, guapos, feos, listos, tontos comiendo todos en la misma mesa del CENOBIO, comiendo la misma bazofia, pero comida era! Asco de TARÁNGANA! .
ReplyDelete¡Parece hecho de los VENCEJOS de la plaza! Calma el estómago, pero no da fuerza y quedas PERLÉSICO. Pero encima hay que dar gracias al señor Tomas, que ha sido muy amable de invitar a una copiosa comida a todo el pueblo, ya que a su señora le fue devuelto su colgante de CURBUNCULOS.
me gustó, invita a imaginar que más pasara en ese pueblo
DeleteGracias Pioneer123... un pintoresco y pantagruélico relato para contextualizar las voces de la semana ;-)
DeleteHábitos personales: evitar TARÁNGANAS, palabras soeces, joyas costosas, especialmente el CARBUNCULO, que es sagrado, armas de fuego y el sexo indebido (entiéndase fuera del matrimonio, que considero vínculo ideal), promover el reciclaje y ayudar a los huérfanos y viudas.
ReplyDeleteEl CENOBIO donde vivo está construido de piedra y madera, alguien con sentido del humor pintó las paredes amarillas y molduras azules.
Por las tardes hago Pilates para evitar la PERLESÍA, tan común en las sociedades modernas. Mientras escribo, en el jardín trinan VENCEJOS y alondras.
Se piensa que la vida austera es aburrida, pero particularmente creo que la realidad es mucho más que bailes y jarana.
"alguien con sentido del humor pintó las paredes amarillas y molduras azules" debe ser una persona interesante nuestro protagonista para pensar de ese modo.
DeleteInteresante enfoque y bella manufactura, me gustó tu texto... ¡Gracias, Eva!
DeleteEn la ciudad vieja se mezclan antiguos monumentos con los habitantes actuales.
ReplyDeleteAl sur veo la entrada del CENOBIO, sus escaleras acumulan cantidad de guano de VENCEJO, por ésta sale un religioso con un llamativo anillo de CARBUNCULO. Sobre la izquierda un mendigo con notoria PERLESIA pide limosna cerca de la entrada lateral.
Al oeste, sobre la plaza hay multitud de puestos ambulantes. Es hora de comer y llama mi atención un cartel reza "choripan pancho TARANGANA bebidas frias"; hacia allí camino, pido un sochori mariposa y acabo mi relato.
Fantástico paisaje descrito de una forma increíblemente visual... ¡muy bueno!... Conocía, por cierto, el choripán... pero... ¿sochori mariposa?... ¿qué sabrosa delicia lleva tan curioso nombre?
DeleteSochori es un vulgarismo para choripán (en realidad para chorizo, pero por metonimia se aplica al choripán)
DeleteMariposa se aplica a cuando se cuece parcialmente cortado longitudinalmente y desplegado (ver http://www.flickr.com/photos/99255685@N00/1770688906)
Curioso e interesante... gracias, Gabriel :)
Delete¡Cuantos nombres de aves que están saliendo en estos desafíos!
ReplyDeletealondra cristofué grulla vencejo yaacabó
Sí, la verdad es que a mí también me está sorprendiendo la inusitada proliferación de criaturas aladas... ;-)
DeleteNo hay ninguno que salga bien parado...
Deletepura envidia de los que no pueden volar ?o no?
Delete...Caminaba cantinfleando y tarareando gràcilmente un tema de Los Beatles.Esa TARANGANA que almorcè me dio grandes dolores de estomago.De repente,siento que me desmayo.una PERPLESÌA.Mi galeno me advirtiò.Yacià desplomado frente al CENOBIO judìo Drahh-Baba.Dos minutos luego,un peculiar VENCEJO,con plumas como un CARBÙNCULO.
ReplyDeleteMe miraba.Cuando arremetiò a volar,recuperè el movimiento.Esa noche no dormì,peor que cuando vi el film UNA ESTANTIGUA EN JAPÒN.