6 - RIDÍCULO ADMINÍCULO

¡Vaya!... en la votación de esta semana de La Llave nos hemos decantado por una palabra extraordinariamente versátil... sugerente, elegante y fácil de encajar en una multitud de contextos e historias... 

...Un verdadero comodín para dar alas a la imagimación y crear infinidad de relatos... relatos como los que compartiremos en esta sexta etapa de nuestro viaje... :)

ADMINÍCULO

CHICHINABO

CÁFILA

YANTAR

INSENSATO

¡Gracias por compartir! ;-)

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Ericktng

¿Dónde estoy? No puedo moverme ¿Y esta CÁFILA de doctores? ¿Son doctores? ¿Estoy en un hospital? ¡Me están operando! ¡¿Qué está pasando?! ¿Me escuchan? No, no me escuchan. ¿Cómo llegué aquí? Lo último que recuerdo es que fui YANTAR al nuevo local del pueblo.
-Qué bueno que cayó éste. Ya nos hacía falta mercancía.
¿Quién dijo eso? ¿Caí dónde? ¿Mercancía? ¡Traficantes de órganos! ¡Oye tú! ¡Déjame! ¡No, no! ¡Deja eso! ¡No, no lo quites! ¡Deténganse, INSENSATOS! Los necesito para vivir. Dejen sus ADMINÍCULOS y libérenme.
-Los pulmones no. Éste chaval solía fumar. Tíralos donde no los encuentren.
¿Que no sirven? ¡Y los tratas como CHICHINABOS cualquieras! Pagarán por esto. ¡Lo verán!
¡Mi corazón no! ¡No!...


Ojo humano

El asceta:

YANTAR, voraz deseo
Tienta mis carnes,
Una CÁFILA política propone
El incumplimiento mis votos,
Ningún signo, ADMINÍCULO sagrado,
Religión o penitencia salvará
De la carcoma que roe los huesos.

Busco la esencia del espíritu
Palabras de certeza busco
Olvido lo falaz, la usura, la malicia
Lo CHICHINABO, la soberbia
La amargura, lo perverso
Renuncio al orgullo persistente.

Yo también soy INSENSATO
También los pies me pesan
En la incertidumbre de la tarde.


Pioneer123

El INSENSATO FILIBUSTERO corría con el ADMINÍCULO de CHINCHINABO mientras la CÁFILA de gente esperaban para YANTAR.


Gabriel (El del Ferry)

Quizá fue por mi porte corpulento
que solo fui un ridículo ADMINÍCULO
un juguete sexual (más nunca pago)
y una CÁFILA de hembras me hubo usado

cual brioso semental, cumplí contento
y puse corazón, fútil articulo
al YANTAR la realidad me vi burlado
fui un gil, un INSENSATO, un CHINCHINABO


Eva Moreti

Después de leer un reducido volumen de “Las mil y una noches” donde los visires tienen una CÁFILA a su disposición, el moderno estudiante buscó algo para YANTAR. Halló apenas un CHICHINABO de pollo medio rancio (con hambre todo vale), buscó algún ADMINÍCULO donde beber un vino turbio que quedaba de la noche anterior y sin demora se tendió a la resolana imaginándose un emir admirado por bellas huríes africanas. Aquel acto INSENSATO lo llevaría directo a la Posta de Auxilios con la más peligrosa intoxicación que haya relatado cualquier anónimo cuento oriental.


Crysolidan

Allí estaba yo… solo… rodeado de una CÁFILA de rechonchos INSENSATOS, disfrutando de un opíparo banquete en medio de una multitudinaria soledad…

A mi lado un supuesto científico, de esmoquin y pajarita… su aburrida conversación de CHICHINABO ponía el hilo musical al tedioso YANTAR, que transcurría lento… pegajoso… sofocante… como un caracol reumático rezumando en una cálida tarde de verano…

Al fin, el personaje colmó mi paciencia, y hastiado de la solemne estupidez de su disertación, tomé la palabra y le dije señalando su pajarita:

“Lunático ciclán, con su pobre discurso, su patético currículo y su ridículo ADMINÍCULO me está usted poniendo de los nervios… déjeme comer en paz si no quiere recibir una buena patada en su único testículo…”

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